Fui al Foreign Office a la 1 y encontré varias cartas. Vi a lord Dunglas, etc., por asuntos de trabajo. Encontré una carta de lord Orford en la que me pedía que fuera a verle a Wolterton Park lo más pronto posible.

El viernes por la noche, pues, si Dios quiere, partiré en el coche. Regresé a Esher a las 4 y encontré a mi querida madre débil, dice que por el cambio repentino del tiempo, que se está poniendo suave y enervante. Un poquito de aire y de cambio le harán bien y seguramente le devolverán su alegría acostumbrada.