Anoche llegó el buque correo y me subieron los despachos esta mañana a las 5. Vienen fechados hasta el 2 de septiembre. Gracias a Dios, todo bien en casa y en Rusia. Allí hago mucha falta, y más la haré en junio próximo. Terminé mis cartas para Bogotá, a fin de tener al día mi correspondencia pública y privada. Lluvia fuerte y truenos. El viejo señor Esteban Palacios murió hoy (es tío de Bolívar) y asistí a su entierro a las 8 p. m. Era juez de asuntos de Estado según el sistema antiguo: muy cabeza dura, extremadamente estúpido y pomposo. Jamás había visto un entierro tan pobre, pero creo que se debió más a política que a ninguna otra cosa. Si su sobrino hubiera estado en el poder y el público le hubiera favorecido, seguro que hubiera sido al revés. Se dice (pero no lo creo) que Páez no está obrando como debería impulsarle a hacerlo su conducta de campeón de la causa, sino que está jugando al cauteloso, y allanando el camino para que se hagan concesiones.