Hice varias visitas a criollos, la primera de ellas al general Piñango 1(General Judas Tadeo Piñango) , un individuo casi negro, una especie de indio zambo, que es miembro del Consejo de Estado. Aparte de su color y de que tiene talento de verdad, está casado con una preciosa criatura perfectamente blanca, nativa de Bogotá. Sus niños son variados de color: uno blanco, uno oscuro, y así sucesivamente. Hoy llegó el correo de Nueva Granada, con fechas hasta el 8 de diciembre, anunciando la elección del general Obando como vicepresidente [sic] de la nueva República, y la notificación correspondiente a los respectivos miembros del cuerpo diplomático en Bogotá. Lo que sigue es copia de la respuesta del representante de su majestad británica:

Legación Británica, 24 de noviembre de 1831.

El suscrito. Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario de S.M.B., se honra en acusar recibo de la nota que, con fecha de ayer, V.E. señor Pereira, Ministro de Relaciones Exteriores, tuvo la amabilidad de hacerle llegar, anunciando que la Convención Nacional ha aceptado la renuncia hecha por el Presidente de la República S.E. el general Caicedo, y la elección para tan alto cargo que la misma asamblea hizo de S.E. el general Obando. El suscrito ha recibido con sincera satisfacción las seguridades contenidas en la antedicha nota, que el nuevo representante del Ejecutivo ha tenido la amabilidad de ordenar que se le dieran, expresando los deseos de S.E. de que los vínculos de amistad que tan felizmente unen a Colombia con la Gran Bretaña sean preservados incólumes. Correspondiendo a esta manifestación, el suscrito tiene el placer de asegurar su confianza de que el Gobierno de S.M. siempre estará deseoso de promover la paz y felicidad de este país, y cultivar entre ellos las amistosas relaciones que tan ventajosas son para ambos, y ruega al señor Pereira que le haga el honor de asegurar a S.E. que siempre serán constantes sus esfuerzos personales para alcanzar tan deseable propósito. Para concluir el suscrito se apresura a expresar su gratitud por la cortesía personal que el anterior Jefe del Ejecutivo le ha dispensado, y las firmes esperanzas que tiene de experimentar la misma benevolencia por parte del actual Vicepresidente de la República. El suscrito se honra en reiterar a S.E. el señor Pereira, las seguridades de su más alta y distinguida consideración. (firmado ) W. Turner. A S.E. el Señor Pereira, etc. etc.

No hay novedades domésticas. Los miembros están llegando de prisa para la reunión del próximo Congreso.