Entre las cartas que me llegaron de Caracas por el paquebote, cuyas fechas iban hasta el 4 de mayo, el señor Wolff me envió copias de dos despachos que se relacionan con el alto respeto y estima que me tienen las autoridades y ciudadanos de la república:
Caracas, 7 de enero de 1841.
Señor:
Sir Robert Ker Porter, Encargado de Negocios de S. M. B. ante nuestro Gobierno, ha notificado que con la autorización de S. M. partirá dentro de poco de esta Capital para Europa, y el Presidente de Venezuela me ha ordenado aprovechar esta circunstancia para informar al Gobierno de S. M., por intermedio de V. E., de la distinguida consideración y estima general que Sir Robert supo granjearse en este país, la noble conducta que ha observado durante los quince o más años que ha permanecido aquí como empleado de S. M. y con la cual, cumpliendo con sus deberes, ha contribuido eficazmente a afianzar las buenas relaciones que felizmente existen entre los dos Gobiernos.
Sería muy satisfactorio para el Presidente, los Miembros del Gobierno y para todos los habitantes de Venezuela, que Sir Robert pudiera regresar para continuar en esta Legación con un rango superior al que actualmente posee, porque así S. M. B. mantendría en Venezuela un intérprete fiel de la amistad y benevolencia que esta nación profesa hacia la Nación Británica y su Soberana, y Venezuela, la posesión de un antiguo amigo que, en todas las circunstancias, ha dado pruebas de sincero interés por su prosperidad.
El Presidente espera que sus deseos de que regrese Sir Robert a Venezuela serán bien recibidos por parte del Gobierno de S. M. B., y he tenido la rara satisfacción de transmitir a V. E. conceptos con los cuales el Presidente hace justicia a los méritos y buenos procedimientos de Sir Robert.
Tengo el honor, etc., etc., (firmado) G. Smith (Copia)
Respuesta del Foreign Office, Downing Street.
Foreign Office, 1° de marzo de 1841.
Señor:
Tengo a honra acusar recibo de la carta de V. Excelencia del 7 de enero, en la que dice que el Presidente de Venezuela le ha instruido que informe al Gobierno de Su Majestad que la encomiable conducta y estimable carácter de Sir Robert Ker Porter, Encargado de Negocios de Su Majestad en Caracas, han contribuido a fortalecer las relaciones amistosas que felizmente subsisten entre la Gran Bretaña y Venezuela, y que sería satisfactorio para el Presidente, el Gobierno y los habitantes de Venezuela que Sir Robert Porter pudiera regresara Caracas con un rango más alto que el que posee actualmente. Permítame Vuestra Excelencia asegurarle que el Gobierno de Su Majestad se siente altamente satisfecho de saber por intermedio de V. E. que la conducta de Sir Robert Porter ha sido tal que ha merecido la aprobación del Gobierno de Venezuela, y que ha ejecutado fielmente las instrucciones que ha recibido del Gobierno de Su Majestad, indicándole constantemente que cultivase la amistad y buena voluntad de la República de Venezuela. Pero lamento verme en la necesidad de comunicar a V. Excelencia, que los arreglos diplomáticos del Gobierno de Su Majestad no me permiten poner en efecto los gentiles deseos que el Presidente de Venezuela ha tenido a bien expresar con relación a dar un rango más alto a Sir Robert Porter. Aprovecho esta ocasión para ofrecer a V. E. las seguridades de mi distinguida consideración, y tengo a honra ser, Señor, el más seguro servidor de Vuestra Excelencia, (firmado) Palmerston Don Guillermo Smith, etc., etc., etc.
Cené en casa de lady' class='cs6-c entry-index'>lady Hamlyn, y fue una muy agradable reunión familiar. Me senté al lado de una persona muy vivaz y agradable, lady' class='cs6-c entry-index'>lady Julia Lockwood, hermana de la difunta condesa de Abercorne. Tiene una linda hija de unos 18 años, vivaz y brillante como ella misma. La pobre lady' class='cs6-c entry-index'>lady Charleville se fue a casa temprano sintiéndose muy mal. Escribiendo todo el día para el barco.