Hoy se celebró una reunión del cabildo, en la cual se determinó que después de la debida consideración del presente estado de cosas y de lo que había sucedido en la municipalidad de Puerto Cabello en la noche del 8 del corriente, al hacerse una declaración pública y abierta como voz y deseos del pueblo «por la Federación de Venezuela», la municipalidad de Caracas como protectora del pueblo y guardiana de su bienestar y felicidad, juzga muy apropiado no ir más allá en el presente momento en cuanto a actos públicos para acelerar los cambios, prefiriendo esperar la llegada de Bolívar como ya lo ha expresado en el tercer artículo de su acta. Confían que les visite y coadyuve en devolverles sus derechos perdidos y acelere la gran convención de los estados, y entonces le expresarán de la manera más contundente que es deseo unánime y ardiente del pueblo que la República de Colombia se convierta en una federación de los Estados y exhortarán a lo mismo a quienes hayan sido delegados por ellos a la gran convención de los estados y que, mientras tanto, debería despacharse un enviado a ver al general Páez declarando su determinación sobre este particular. Nada más de importancia. Creo que el paso que ha dado el cabildo llevará al grupo de Valencia a tomar algunas medidas violentas, siempre y cuando Mariño no esté satisfecho con lo que Caracas no ha hecho. El señor Warner cenó conmigo. El doctor en casa del señor Alderson. Termómetro, 22 a las 7 y 24, a las 4.