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Capítulo II Venezuela tierra turbulenta
1825 noviembre 27 - 1827 enero 07
Venezuela tierra turbulenta
1825 noviembre 27 - 1827 enero 07
Subcapítulos
Caracas

Esta mañana me visitó el coronel Smith y me dijo que la decisión del cabildo sin duda había señalado el fin de los de Valencia y Puerto Cabello, pues la totalidad de las tropas de esta plaza se había retirado de ese grupo por medio de la influencia del coronel Macero y de él mismo en consejo con el doctor Mendoza. Que si bien una demostración de oposición bélica podría tener lugar en Valencia por parte del grupo, el batallón de esa ciudad no daría un paso sin Páez. De hecho, la conducta y precavida política del intendente, ayudada por los antedichos oficiales, derrotará y probablemente pondrá fin a las turbulentas opiniones de Peña, Carabaño y otros. Al encontrarse así corregidos y no respaldados como se esperaba aquí, no les quedará otro camino que huir o encerrarse en Puerto Cabello y, muy probablemente, invitar a los españoles a esa fortaleza. Mariño parece temeroso de regresar aquí: estaba en Valencia el 17. A Páez le convendría quedarse donde está hasta que el mal se erradique de esta porción de la provincia. Bolívar debía de salir de Lima para Bogotá el 4 de junio. Si es así, ya está en esa capital en este momento. Me dicen que escribió a Santander en tono iracundo y le pidió que no tomase medidas violentas, pues estaba seguro que después de la acusación a Páez, Venezuela estaría en revuelta. A las 11 fui a visitar a María Antonia Bolívar, hermana del presidente y encargada de sus asuntos en esta parte de Colombia. Había recibido carta de S. E. fechada en Lima el 2 de junio, en la cual decía que debía marchar de esa capital en cuestión de días rumbo a Bogotá, y que esperaba estar en Caracas para mediados de octubre. Bolívar tiene dos hermanas aquí, ambas mucho mayores que él. La dama a quien visité es altamente respetada, pero a su hermana se la detesta por su crueldad con sus esclavos, y recientemente se la ha citado a uno de los tribunales de justicia por casi haber matado a una esclava, quien fue exhibida en un estado muy lastimoso. Así están los refinados sentimientos de las damas republicanas católicas. No ha llovido. Termómetro, 22 a las 7 y 24, a las 4.

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