Las cartas siguientes fueron recibidas por el general Páez de los ministros, en relación con el asunto Padilla, quien ahora es fugitivo por los bosques que bordean el Magdalena. El coronel Ferguson y Bolívar le persiguen, con órdenes de atraparlo vivo o muerto.
Tengo a honra comunicarme con V. E. para que se haga saber a quien corresponda en ese Departamento que desde el 1° hasta el 9 de marzo último la paz en la plaza fuerte de Cartagena fue perturbada por una facción a cuya cabeza estaba el General Padilla, quien obligó al General Comandante del departamento a renunciar a su cargo el 5 del mes en referencia, poniendo al mando un Jefe de su elección. El 6 varios rebeldes le proclamaron General Comandante e Intendente del Departamento y, consiguientemente , obró de un modo que indicaba su aceptación de estos cargos, privando de ellos a las autoridades legítimas. Afortunadamente el Señor General Mariano Montilla tenía orden del Poder Ejecutivo de encargarse de la Comandancia General de Magdalena en caso de alguna conmoción interna o invasión externa; y sabiendo que había sucedido el primer caso se hizo reconocer por el cuerpo del ejército y lo hizo salir del cuartel; y respaldado por esta fuerza exigió que se le reconociera como Comandante General del Departamento, como había hecho el Intendente y Comandante de la plaza antes de que Padilla abrogara estos cargos. El General Montilla, procediendo firmemente desde los alrededores de Cartagena donde se encontraba entonces, y no encontrando Padilla y sus cómplices ningún soporte por parte del virtuoso pueblo de Cartagena, aquél [Padilla] se separó de la Intendencia y luego, de la Comandancia General que había intentado usurpar, y partió fugitivo de Cartagena con algunos de su grupo hacia Tolú y los llanos de Mompox. Se dice que desde allí se dirigió a Ocaña después de dejar Cartagena. La paz y la seguridad se restablecieron enteramente sin que haya habido ningún acontecimiento reciente en el resto de la Provincia. El Libertador recibió estas noticias el 25 de marzo en Zuata, y habiendo al mismo tiempo recibido las agradables noticias de que la paz se había restablecido casi enteramente en Venezuela, que la flota española se había retirado de sus costas sin haber podido ayudar a los rebeldes como lo había pretendido, y que a favor de la preservación del orden y la unidad nacional reinaba el mejor espíritu público, V. E. decidió cambiar de rumbo y dirigirse a Cartagena para embarcarse en el puerto de Botija en el río Cañaveral. Este viaje del Libertador se realizará muy pronto, y después de establecer sobre firmes bases la paz y el orden en el Departamento de Magdalena, regresará al Valle de Cúcuta.
Transcribo esto a V. E. para su conocimiento y propósitos convenientes. Que Dios guarde a V. E. (firmado) José Manuel Restrepo 1(José Manuel Restrepo (1780-1864). Distinguido político colombiano. Fue secretario de Bolívar. Además de secretario de Estado. Es autor de la Historia de la Revolución de Colombia. París, 1827).
Bucaramanga, Abril 11 de 1828.-18
A S. E. el Jefe de Venezuela.
Desde que el General de División Mariano Montilla, General Comandante del Magdalena, tomó posesión de la plaza fuerte de Cartagena el 9 pasado, no ha habido ningún acontecimiento en ese departamento hasta el 25 último. Estas son las últimas noticias recibidas en esta Secretaría. El Gobierno ha ordenado que el General Padilla así como todos los demás incluidos en la conspiración de Cartagena sean juzgados según el Decreto del 25 de febrero, y S. E. el Libertador Presidente ha decidido quedarse en esta ciudad para observar mejor el Magdalena, y donde puede tomar cualquier medida subsiguiente que requieran los acontecimientos, aunque ahora puede pensarse que, con toda probabilidad, el Magdalena no será perturbado. Que Dios guarde a V. E. (firmado) Carlos Soublette 2(Distinguido patriota quien desde joven se incorporó al ejercito republicano. Sirvió a las órdenes de Miranda y de Bolívar. Se casó con Olaya Buroz Tovar. Era cuñado del Dr. Cristobal Mendoza y del general Daniel Florencio O'Leary.).
Velada en casa del señor Rojas. Ha llovido fuerte casi todo el día.