Han llegado noticias de Bogotá de que el general Sucre 1(Gran mariscal Antonio José de Sucre [1795-1830]. Desde joven se había enrolado en las tropas del general Miranda [1811-1812]. En 1819 era ya jefe del Estado Mayor del Libertador. Ganó batallas decisivas: Pichincha [1822] y Ayacucho [1824] para la independencia de América. Fue electo presidente vitalicio de Bolivia (1826). Fue asesinado en Berruecos el 4 de junio de 1830), tan célebre como Grand Maréchal y jefe de Bolivia, había sido asesinado entre un lugar llamado Ventaquemada y Pasto por una banda de ladrones. Es grande la sensación que el asesinato ha causado en Bogotá, pero hasta ahora no se le echa la culpa a la parte política en la capital, pues es bien conocida la cantidad de ladrones y asesinos de que dispone Pasto. Los caraqueños empiezan a murmurar por lo que pasa en Valencia: la forma sorda en que, poco a poco, Páez parece estar estableciendo su cuartel general y, por consiguiente, la capital, durante su período de presidente o de poder. Allí sesiona actualmente la Asamblea Nacional, y no hay duda de que se le pedirá que ocupe el cargo de presidente (el primero) de la República de Venezuela. Sea como fuere, esta capital no mantendrá su rango como tal durante todo el período de gobierno de S. excelencia. No hay duda de que los amigos del Libertador están tramando algo, y pronto ocurrirá una explosión. Así abandonado, el pueblo de Caracas no se someterá mansamente al desprecio que significa arrebatarle su antiguo honor y ver humillada su ciudad, pero tenemos que quedarnos con todas las bayonetas leales aquí.