Escribiendo todo el día al Foreign Office, dando cuenta a lord Palmerston del progreso de las negociaciones con Venezuela relativas a la respuesta a la petición del legado de los tenedores de bonos colombianos con relación a sus reclamaciones respecto del capital e intereses correspondientes a los préstamos. Esta república habla honesta y justamente y creo que tiene los medios necesarios para subvenir a su debida proporción de la deuda, y si continúan la tranquilidad y su estado de prosperidad actual, en pocos años se encontrará libre de esta carga. No hay noticias de ninguna clase. El tiempo está delicioso, pero sería bien caluroso para el blanquecino europeo.