111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111
Capítulo V El regreso a mi querida Inglaterra
1830 enero 01 - junio 07
El regreso a mi querida Inglaterra
1830 enero 01 - junio 07
Londres.

Pasé la noche allí, y después de desayunar le acompañé a la ciudad. Visité al señor Warren y a las dos había regresado a Portland Place.

Cuando la señora Skinner me volvió a conducir al Foreign Office me entrevisté de nuevo en ami con lord Dunglas, y discutimos los pros y contras del asunto que ahora me preocupaba. Naturalmente que favorecerá mi interés futuro el regresar a Sudamérica, aunque sea por un período corto, pues en el caso de que se logre la independencia de Venezuela, se me nombrará jefe del cargo consular y diplomático, con aumento de sueldo y de rango, junto con el éclat de volver a firmar el Tratado. En el curso de la semana que viene debo entrevistarme con lord Aberdeen.

Después de ver a lord Dunglas fui a hablar con el señor T. Bidwell, quien también me habló en los mismos términos y dijo que el gobierno no intervendría ni se opondría al acto de separación, y que tan pronto como yo dijera oficialmente que estaba dispuesto a ir, lord Aberdeen solicitaría del Almirantazgo un barco de guerra para transportarme de regreso a Colombia. Cené con el coronel Allen; conocí al señor Hammond, al coronel Milman y otros. A las 10 regresé a casa de la señora Skinner, donde encontré una fiestecita musical, en la que la señorita Bruce cantó como un ángel. A la una se había terminado.

1
111
111
111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111 111111
U