Salí de Caracas a las [?] de la mañana acompañado por el teniente Erskine. Llegamos a La Guaira a las 9. A las 12 abordé el Druid y fui recibido con honor y amabilidad por el capitán Chambers. Bolívar le había obsequiado una caja de rapé, de oro, como señal de aprecio por haberle llevado a Cartagena. El capitán Ch. habló con satisfacción del aparente placer que el Libertador había experimentado por la recepción que se le había dado en el Druid. Pasé el día a bordo, y le di toda la información que tenía sobre el estado del país, pero más íntimamente sobre Venezuela, etc., para orientación del almirante Fleeming en cuanto a seguir enviando barcos de guerra a estas costas, etc. El intendente doctor Mendoza visitó al capitán Chambers.