Como siempre, mil rumores vagos, pero creo que es bastante cierto que el general Páez estaba en Maracay con cuatrocientos o 500 llaneros el día 20, y sobre esto se basa el rumor de que el 21 entró en Valencia, lanza en mano, pero sin hostilidad, y que al entrar en la plaza los soldados le recibieron inmediatamente con vivas, y que muchos de sus oficiales y dirigentes de la reciente revuelta fueron hechos prisioneros. Si esto es cierto, ¿qué hará Puerto Cabello?, y cómo obrará él [Páez] hacia esa plaza y la nuestra. Todo esto, si es verdad, ocurrió el martes pasado, o sea hará cinco días mañana: de modo que, por muy guardado que esté el camino y estrictamente prohibida la traída de cartas por los viajeros, para el lunes tendrá que saberse algo auténtico. Las autoridades de aquí tratan de reunir una comisión para enviársela al general Páez, pero nadie quiere cumplir esta misión. Briceño Méndez es la persona más indicada para dirigirla y ser su órgano. Las tropas de Macero y Cisneros están como estaban, y me dicen que hay correos continuos con el jefe, quien ordena que no se haga movimiento alguno sin sus órdenes estrictas. Cuando se haga, será simultáneo. Una carta del señor Lord recibida hoy me informa que el buque correo llegó con tiempo suficiente para no perder el paquebote. El barco que trajo esta información salió de Saint Thomas el domingo pasado (19), y el buque aún no había llegado a la isla; de modo que como el segundo paquebote seguramente zarpará hoy para Inglaterra, las cartas, etc. irán en él.